PSG – Barça | Nuno Mendes y el reto de parar a Lamine Yamal
Gran parte del partido de ida de los cuartos de Champions entre París Saint-Germain y FC Barcelona se decidirá en los extremos y, por ende, en los laterales. Luis Enrique no podrá contar con su mejor arma en el carril derecho, Achraf Hakimi, sancionado por acumulación de tarjetas. Pero en el carril izquierdo sí que podrá estar, si no se tuerce nada, su mejor baza: Nuno Mendes.
El portugués ha resultado ser uno de los grandes ‘fichajes’ del PSG en este segundo tramo de temporada. Se lesionó cuando aún Galtier dirigía el equipo, y Luis Enrique no pudo contar con él hasta el pasado 25 de febrero. Desde entonces, ha ido sumando minutos y cogiendo ritmo.
PRIMERO KUBO
«Es un jugador de primer nivel, es fantástico tanto ofensivamente como defensivamente«, afirmaba el asturiano sobre él horas antes de darle la titularidad en la vuelta de octavos de Champions ante la Real Sociedad en Anoeta, luchando con bastante éxito contra un ‘jugón’ como Take Kubo.
En la ida de los octavos, disputada en el Parque de los Príncipes, el elegido para cubrir el lateral izquierdo fue Lucas Beraldo. Sin experiencia en Champions y con poco tiempo en el equipo, el brasileño completó un partido serio ante el japonés, pero su aportación ofensiva no se puede comparar con todo lo que ofrece el portugués. El curso pasado firmó dos goles y siete asistencias en 32 partidos disputados.
LAMINE YAMAL, LA PRUEBA DE FUEGO
Pero ahora el test será de una dificultad extrema: defender a Lamine Yamal. Una pesadilla para cualquier lateral. Luis Enrique contará con su mejor hombre para ello, si no se tuerce nada, pero el atacante del Barça viene como un tiro.
El de Rocafonda maravilló al mundo contra Brasil. Salió ovacionado del Santiago Bernabéu a los 16 años, situación que solo han vivido otros tres futbolistas del Barça. Maradona en 1983, Ronaldinho en 2005 e Iniesta en 2015. Un futbolista distinto y que cada vez se muestra más imparable.
Capaz de reanimar al Barça cuando está tocado, hace las cosas con una naturalidad insultante y ve el fútbol de una manera distinta al resto. Esta temporada suma seis goles y siete asistencias, aunque su impacto va mucho más allá de las cifras.
Nuno Mendes, que llegó a París el verano de 2022 a cambio de 38 millones de euros, tiene solo 21 años y el reto de liderar el carril izquierdo del Parque de los Príncipes durante muchos años.
El próximo 10 de abril tendrá cara a cara a un jugador con una técnica privilegiada, capaz de controlar su cuerpo como pocos, y que casi siempre elige la mejor opción. Cuando Lamine tiene la pelota pasan cosas. Y el portugués tendrá que evitarlo a toda costa.