La fotografía de la DANA elegida por el Rey
Una fotografía de la Agencia EFE que fue tomada el 7 de noviembre en Paiporta, una semana después de las inundaciones que arrasaron el este y el sur de la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre y que causaron más de 220 muertos. La imagen trasladaba el esfuerzo conjunto de afectados, voluntarios y miembros de las Fuerzas Armadas recogiendo lodo durante la DANA y fue la única fotografía que Felipe VI escogió este año para su tradicional mensaje de Navidad.
Junto a ella, desde el Salón de Columnas del Palacio Real, también había un decorado con un árbol de Navidad y un belén con la Sagrada Familia. Un ejemplar facsímil de la Constitución junto a la fotografía de la tragedia de la DANA y las banderas de España y la Unión Europea, fueron los únicos elementos que se situaron en la escenografía de este año, en el que el monarca pronunció su undécimo discurso navideño.
La familia real acudió el domingo por sorpresa al mercado de Catarroja, una de las localidades más afectadas por la DANA . Posteriormente, también se desplazaron a la pedanía valenciana de El Palmar, ubicada en La Albufera, donde comieron en un restaurante tradicional de la zona la típica paella valenciana, para visitar después el municipio de Picanya y un mercado navideño en Alaquàs, localidades también gravemente afectadas por la DANA del pasado 29 de octubre. Los reyes estuvieron acompañados por sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, que visitaban por primera vez la zona.
La primera visita de los reyes a la zona cero de la DANA se produjo el 3 de noviembre en Paiporta, donde se registraron incidentes por parte de varias personas que les increparon y lanzaron barro.
El 12 de noviembre, Felipe VIvolvió a Valencia para visitar las unidades militares desplegadas en la zona y una semana después los reyes visitaron Chiva y Utiel, ya sin ningún incidente.
Asimismo, el pasado 9 de diciembre ambos acudieron al funeral organizado por el Arzobispado de Valencia en la catedral de la ciudad en memoria de las 223 víctimas mortales de la DANA .
La presencia de la DANA
Felipe VI comenzó y acabó su discurso con la tragedia que asoló hace casi dos meses varias zonas del este y sur de España, especialmente en Valencia, y apostó porque la solidaridad que ha unido a todos los españoles durante la DANA siga presente en cada acción y decisión.
Y por eso pidió que llegaran las ayudas a todos los que lo necesiten y recordó a los fallecidos y desaparecidos y a sus familias, así como a las miles de personas que «vieron cómo lo que hasta hacía poco era su pueblo, su barrio, su trabajo, su casa, su negocio, su escuela, quedaban reducidos a escombros o incluso desaparecían».
Un hecho «difícil de asumir, pero del que todos deberíamos poder sacar las enseñanzas necesarias que nos fortalezcan como sociedad y nos hagan crecer», recalcó el monarca, que pidió que no se olviden nunca aquellas primeras imágenes de las inundaciones, los rescates y la ayuda que opuso «a la fuerza implacable del agua y del lodo la fuerza abrumadora de la solidaridad y de la humanidad».
Una solidaridad en el trabajo de voluntarios anónimos y servidores públicos destacada por el monarca, quien recordó cómo también conocieron y entendieron «la frustración, el dolor, la impaciencia, las demandas de una coordinación mayor y más eficaz de las administraciones».
Emociones todas ellas que surgen, aseguró, de una misma raíz: «La conciencia del bien común, la expresión del bien común, o la exigencia del bien común».
El rey rememoró cómo vecinos, voluntarios, equipos de protección civil, bomberos, cuerpos de seguridad, Fuerzas Armadas, ONG, y también empresas organizaron colectas y donaciones, una ayuda que está propiciando que, poco a poco, las más de 800.000 personas afectadas recuperen paulatinamente en su vida cierto grado de normalidad, y «que el medio y largo plazo quede igualmente atendido para asegurar realmente la recuperación».