Esta es la historia de Jessica Brady, joven que fue diagnosticada con una infección urinaria, pero tenía cáncer y murió

Instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han advertido de la importancia que tiene el hecho de que las y los pacientes con cáncer sean diagnosticados tempranamente. Prueba de ello es la historia de Jessica Brady, una joven que a sus 26 años de edad perdió la vida por la enfermedad, ya que al principio los médicos le habían dicho que únicamente tenía una infección urinaria. 

Ahora, la madre de Jessica, la señora Andrea, ha iniciado una campaña que tiene el objetivo de impulsar la llamada “Ley de Jess”, misma que pretende que cuando una persona siga teniendo síntomas después de tres consultas, su caso sea elevado para una nueva evaluación. 

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¿Cómo fue que a Jessica le diagnosticaron una infección urinaria? 

De acuerdo con la información que su madre ha expresado, mientras estaba la pandemia de Covid-19, Jessica fue diagnosticada por su médico de cabecera con una infección urinaria y con el virus SARS-CoV-2. No obstante, el veredicto del doctor únicamente se dio por medio de una consulta virtual, ya que no accedió a darle una cita presencial. 

Aún así y pese a que Jessica presentó por meses síntomas como goteo nasal, vómito y pérdida de peso,  el mismo diagnóstico fue refrendado por el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido. Esta situación ocurrió incluso sin que la joven fuera sometida a algún análisis o prueba que confirmara dicho pronóstico. 

Jessica perdió la vida tras tres semanas de su diagnóstico 

Debido a que la salud de Jessica no presentaba una mejoría, buscaron a un especialista de una institución privada. Fue hasta ese momento que la joven fue diagnosticada con cáncer en etapa cuatro y la gravedad era tal, que ni siquiera se pudo identificar cuál fue la causa del padecimiento. 

Y es que para ese momento, el cáncer de la joven ya se había extendido a diferentes partes de su organismo tales como el estómago, el hígado, la columna vertebral, los ganglios, los pulmones y hasta los huesos. 

Ante todo este panorama, tuvieron que pasar apenas tres semanas desde su diagnóstico, para que Jessica perdiera la vida la mañana del 20 de diciembre del año 2020. Puesto a que su madre piensa que si alguno de los primeros médicos la hubieran diagnosticado correctamente antes la situación ahora sería diferente, ha comenzado con una campaña de prevención para otras personas en una condición similar. 

Cabe mencionar que incluso se ha implementado una recaudación de fondos en nombre de la joven a fin de invertir en el diagnóstico temprano del cáncer. Esto sobre todo, porque según la página de la causa, sólo alrededor del 54% de los casos de esta enfermedad, se logran diagnosticar en etapas uno y dos.