Detenido en Gijón por rociar con alcohol a su novia y prenderle fuego
Una intervención policial que evitó una desgracia. La Policía Nacional detuvo en Gijón este viernes a un hombre nacido en 1973 por, supuestamente, haber rociado con alcohol a su novia y prenderle fuego. La víctima permanece ingresada en el hospital con quemaduras de cierta gravedad, aunque en principio no se teme por su vida. Los hechos sucedieron en el hueco que hay debajo del viaducto de la calle Carlos Marx, una de las zonas más degradadas de la ciudad y donde pernoctan de forma habitual personas sin hogar entre montones de basura. La mujer salió de este lugar a la carrera y fue corriendo a pedir ayuda al Albergue Covadonga tras la agresión. Los profesionales del centro fueron los que llamaron a la Policía Nacional y a los efectivos sanitarios que atendieron a la mujer, de 33 años. «La vimos llegar con el pecho y la cara roja«, aseguraron los testigos.
La escena sorprende por su crudeza. Las intervenciones policiales en el entorno del Albergue Covadonga suelen ser habituales, pero casi siempre por temas menores. La de este viernes sucedió sobre las cinco de la tarde. A plena luz de uno de los días más calurosos que se recuerdan en una primavera gijonesa. Los dos implicados, tanto el agresor como la víctima, son personas sin hogar. Ella es usuaria habitual del Albergue Covadonga. La mujer tuvo que ser atendida en el aparcamiento del centro por una UVI Móvil. Las fuentes sanitarias confirmaron que había sido rociada con alcohol por su pareja y prendida fuego. Sufrió quemaduras considerables. Fue ella la que salió corriendo de la zona y se dirigió al Albergue Covadonga, que se encuentra a escasos metros del lugar. Los profesionales de este centro gijonés fueron los primeros en hacerse cargo de ella.
«Tenía quemaduras. Unas parecían más graves que otras«, comentó una persona que presenció lo sucedido. «Tenía todo el pecho rojo y parte de la cara», contó otro hombre, que conocía a la víctima tan solo de vista. La situación generó un gran revuelo en la zona. Suele ser frecuente que el aparcamiento del Albergue esté repleto de usuarios del centro haciendo vida social a sus puertas. Con la llegada de las patrullas y de la ambulancia, muchos usuarios que se encontraban en el interior del albergue, un edificio de ladrillos rojos, salieron al exterior para tratar de enterarse de lo que había pasado. Los propios trabajadores llamaron a la Policía Nacional y a la ambulancia. La mujer fue evacuada en UVI Móvil al HUCA. Permanecía ingresada en el principal centro médico de Asturias. No obstante, en principio, se estima que su vida no corre peligro.
El espacio que hay debajo del viaducto de Carlos Marx permanecía el sábado por la tarde vacío. Y no porque ya no duerma gente ahí, ya que en el lugar permanecían varios colchones. Estos se encuentran rodeados de montones de basura. Hay incontables latas de cerveza vacía, cartones, bolsas de plástico y restos de comida y de ropa sucia. Las intervenciones en este lugar llevaban tiempo sin trascender. Habían sucedido incendios como, por ejemplo, el que tuvo lugar en febrero de 2020. Los bomberos tuvieron que emplearse a fondo para sofocar las llamas que devoraron un viejo colchón. En ese momento, la zona no se encontraba ni de lejos tan llena de basura como en estos momentos. Este lugar podría tener los días contados puesto que está previsto que, fruto del plan vías, se derribe el viaducto. Qué alternativa tendrá quien duerme ahí no se ha barajado.