Donald Trump compra un Tesla en la entrada de la Casa Blanca: este es el modelo que eligió

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, adquirió este martes un Tesla Model S rojo brillante, tras elegirlo de entre varios autos de la marca propiedad de Elon Musk, los cuales fueron estacionados frente a la Casa Blanca.
La compra fue un gesto que busca mostrar su respaldo al magnate y su compañía de vehículos eléctricos, en medio de críticas por su cercanía política y el papel de su agencia de “eficiencia gubernamental”.
El sedán, valorado en aproximadamente 80,000 dólares (más de 1.5 millones de pesos), fue recibido con entusiasmo por Trump, quien exclamó “¡Guau, es hermoso!” mientras se acomodaba en el asiento del conductor.
Elon Musk, quien acompañó al presidente en el asiento del pasajero, bromeó sobre “darle un ataque al corazón al Servicio Secreto” al hablar de la capacidad del vehículo para acelerar de 0 a 60 millas por hora (95 kilómetros) en pocos segundos.
Trump anunció que firmaría un cheque y dejaría el auto en la Casa Blanca
Aunque por razones de seguridad los presidentes de Estados Unidos no suelen conducir, Trump anunció que firmaría un cheque personalmente por el auto y lo dejaría en la Casa Blanca para uso de su personal.
El presidente expresó su esperanza de que la compra impulse a Tesla, una empresa que enfrenta ventas a la baja y una caída del 48% en el precio de sus acciones desde que asumió el cargo en enero. Sin embargo, tras el anuncio, las acciones de Tesla subieron casi un 4% el martes.
El evento, que tuvo lugar en la entrada de la Casa Blanca, es el más reciente ejemplo de la estrecha relación entre Trump y Musk, quien invirtió significativamente en la campaña de reelección del presidente el año pasado y se ha convertido en una figura clave en su segundo mandato como asesor.
En un mensaje publicado anoche en redes sociales, Trump calificó la compra como “una muestra de confianza y apoyo a Elon Musk, un verdadero gran estadounidense”, y acusó a la “izquierda radical” de intentar boicotear a Tesla para dañar a Musk y sus ideales.
Musk, quien sigue liderando Tesla, SpaceX y la plataforma X, ha defendido su rol multifacético. “Elon está ‘arriesgándose’ para ayudar a nuestra nación, ¡y está haciendo un TRABAJO FANTÁSTICO!”, escribió Trump.
Musk sufre críticas por su papel en el gobierno que impactan a sus empresas
Sin embargo, el empresario enfrenta múltiples desafíos: X sufrió un “ciberataque masivo” el lunes que interrumpió su funcionamiento, y los últimos lanzamientos de prueba del cohete Starship de SpaceX terminaron en explosiones. Además, Tesla ha sido blanco de protestas, con incidentes recientes que incluyen disparos en un concesionario en Oregon y un incendio que destruyó cuatro Cybertrucks en Seattle.
El anuncio nocturno de Trump y su uso de fondos personales para apoyar a un aliado político han reavivado críticas sobre la mezcla de intereses públicos y privados. Este patrón no es nuevo: durante su primer mandato, la asesora Kellyanne Conway promocionó productos de Ivanka Trump, y el propio presidente ha vinculado su imagen a una criptomoneda lanzada antes de su toma de posesión.
Musk, la persona más rica del mundo y con influencia en la administración a través del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), admitió en una entrevista con Fox Business que equilibrar sus negocios y su rol como asesor de Trump es “extremadamente difícil”.
“Solo estoy aquí para intentar hacer que el gobierno sea más eficiente y eliminar el desperdicio y el fraude”, afirmó.
Fuente heraldodemexico.com.mx